Mañana y el jueves seguirá ventoso. En los últimos cuatro meses los puntanos debieron habituarse al fenómeno que a muchos fastidia.
Según el Flaco Spinetta, “todas las hojas son del viento”. Pero los sanluiseños han visto en los últimos cuatro meses que, en vez de llevárselas, los sucesivos vientos, que han soplado en la provincia hasta el hartazgo, las han acumulado, junto con el polvo, en sus patios, en los desagües pluviales, junto a sus puertas y ventanas. Y mañana y pasado no serán la excepción: seguirá ventoso.
De acuerdo con el pronóstico de la Red de Estaciones Meteorológicas (REM) de San Luis, mañana estará “algo ventoso e inestable, con lluvias y tormentas probables. El viento será leve a moderado del cuadrante sur con ráfagas fuertes”. Y pasado, habrá “viento leve a moderado del sureste y rotando al noreste por la tarde”.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) pronostica para mañana que en la provincia el viento oscilará entre los 23 y 31 kilómetros por hora, con dirección sudeste, con ráfagas que oscilarán entre los 42 y los 50 kilómetros por hora durante la madrugada y la mañana; y por la tarde y la noche aumentarán a entre 51 y 59 kilómetros por hora.
Para el jueves, el SMN estima que el rango se mantendrá entre los 23 y 31 kilómetros por hora, del sudeste durante la madrugada y la mañana, y del este por la tarde y la noche. Las ráfagas continuarán a entre 51 y 59 km/h hasta la mañana, pero descenderán a entre 42 y 50 km/h durante la tarde y la noche.
Por lo demás, salvo el fastidio por la persistencia ventosa, para mañana no asoman en el horizonte motivos de preocupación. El Sistema de Alerta Temprana del Servicio Meteorológico Nacional mantiene pintado en “Nivel verde-tranquilidad” todo el territorio puntano, ya que “no se esperan fenómenos meteorológicos que impliquen riesgos.”
Donovan, punto récord
El viento, al que los puntanos debieron habituarse en los últimos cuatro meses, es causado por las diferencias de presión en la atmósfera terrestre. La distinta incidencia de los rayos del sol en diferentes puntos del planeta –mayor en la zona del Ecuador y menor hacia los polos– genera diferencias de temperatura en distintas zonas geográficas y distintos puntos de la atmósfera. Esto causa diferentes grados de presión atmosférica, lo que provoca el movimiento del aire, es decir, genera el viento.
El aire se desplaza desde las zonas de alta presión, conocidas como anticiclones, hacia las de baja presión, llamadas ciclones.
La rotación del planeta sobre su eje, que aumenta desde el Ecuador hacia los polos, también influye en el viento. Este fenómeno, conocido como “efecto Coriolis”, desvía el viento hacia la derecha en el hemisferio norte y hacia la izquierda en el hemisferio sur.
Entre el domingo y ayer, durante un lapso de poco más de cuarenta horas, Daniel Donovan ostentó el récord en ese fenómeno climático que afecta a San Luis desde agosto: según el informe de vientos de la REM, en esa localidad de Juana Koslay midieron ráfagas de 31,20 metros por segundo. La segunda medición más elevada fue en el Aeropuerto San Luis, de la capital, y fue de 23,62. La tercera, en Naschel, de 21,01.
Noviembre, más frío que abril y mayo
Además, durante el fin de semana pasado muchos fueron los que tuvieron que sacar lo que ya habían guardado, en su creencia, hasta fines de marzo. Camperas, buzos, mantas, frazadas, salieron a lucirse ante un inusual descenso de la temperatura a niveles impensados para esta época del año, en la que la primavera ya está más cerca del verano que del invierno.
El fenómeno quedó registrado en los guarismos que analiza la REM (https://clima.sanluis.gob.ar/). En sus primeros trece días, noviembre acumuló 23 horas de frío, mucho más que las 4 de abril y las 22 de mayo, en el otoño que se encaminaba hacia el invierno.